22 de septiembre de 2017

LA FELICIDAD COMO OBJETIVO DE LA EDUCACION

Con el arranque de cada curso académico se renuevan los debates en torno a la calidad del sistema educativo y resurgen temas recurrentes como la conveniencia o no de los deberes; el nivel de la enseñanza de idiomas; el fracaso en matemáticas o la sobrecarga de la jornada infantil por la acumulación de horas de clase y actividades extraescolares. A menudo parece que buscamos lo imposible: una enseñanza que forme de manera integral pero que sea competitiva; que transmita valores enraizados en nuestro acervo social y cultural pero se ajuste a un mundo en cambio continuo; que eduque niños felices pero les haga conscientes de los retos y desafíos del mundo actual...

Merece la pena escuchar la charla Ted pronunciada en el 2013 por Logan LaPlante, una adolescente americano que entonces tenía 13 años y se había educado desde los 9 fuera del sistema escolar, en casa, tutelado por sus padres. En su charla, Logan cita a pedagogos que ya han pasado por estas entradas, como Roger Walsh o Sir Ken Robinson, y, como el primero de ellos, lamenta que el sistema educativo se oriente a cómo ganarnos la vida en lugar de cómo tener una vida feliz. Logan valora en su charla elementos como el contacto con la naturaleza, la responsabilidad hacia la comunidad, la creatividad, el ejercicio físico. 



Dos años después de esta charla, los padres de Logan volvieron a matricularlo en una escuela con un proyecto educativo flexible, en el que la asistencia a clase no es obligatoria y la mayor parte del trabajo puede resolverse online. Porque a su juicio el debate no gira en torno a "un sistema" educativo, sino que lo que hace falta es cambiar "la actitud" en torno a la educación, para que ésta se ponga siempre al servicio de los jóvenes, y no a la inversa. Con quince años, los padres de Logan valoraron la necesidad de que tuviera un contacto más continuado con adolescentes de su edad, que pudiese valorar la oportunidad de ir a la universidad... Al final, la flexibilidad parece ser una de las palabras clave si queremos de verdad lograr cambios en el modo de educar a nuestros hijos.

HAPPINESS AS AN EDUCATION GOAL
With the start of each academic year, the debates on the quality of the education system are renewed and recurrent themes such as the desirability or not of the duties are resurfaced; the level of language teaching; failure in math or the overload of the children's day by the accumulation of class hours and extracurricular activities. Often it seems that we are looking for the impossible: a teaching that forms in an integral way but that is competitive; that transmits values ​​rooted in our social and cultural roots but is adjusted to a world in continuous change; to educate happy children but make them aware of the challenges of today's world ...

It is worth listening to the Ted talk given in 2013 by Logan LaPlante, an American teenager who was then 13 years old and had been educated from 9 out of the school system, at home, under the tutelage of his parents. In his talk, Logan quotes pedagogues who have already appeared in this blog, such as Roger Walsh or Sir Ken Robinson, and, as the former does, regrets that the education system is oriented to how to earn a living instead of how to have a happy life. Logan values ​​in his talk elements such as contact with nature, responsibility towards the community, creativity, physical exercise.

Two years after this talk, Logan's parents re-enrolled him in a school with a flexible educational project, where classroom attendance is not mandatory and most of the work can be resolved online. Because in their opinion the debate does not revolve around an "educational system", but what is needed is to change "the attitude" around education, so that it is always at the service of young people, and not to the reverse. At age fifteen, Logan's parents valued the need for more continued contact with teenagers his age, who could appreciate the opportunity to go to college ... In the end, flexibility seems to be one of the key words if we really want to make changes in the way we educate our children.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario en As Salgueiras