24 de mayo de 2012

Un parque celta en Jinzhou

A miña visita a Galopín
Hai pouco tempo fun convidado a visitar as instalacións de Galopín en Cerceda. Intuía que se podía tratar dunha visita interesante xa que coincidira nalgunha ocasión con Manu e tamén tiña traballado co equipo de Galopín no desenvolvemento dun proxecto.
Pero estar alí, coñecer todo o equipo, ver como e onde traballan e sentirme partícipe do seu ambiente, sorprendeume moi gratamente. Logo, coñecer o proxecto de As Salgueiras, da man do propio Manu, fascinoume.
A invitación de Galopín xurdiu a raíz do proxecto do Xardín Celta que ideei con motivo da Exposición Universal de Arte da Paisaxe que terá lugar en China no 2013.  Como resposta a esta   acollida, pensei que este blog sería un bo lugar para mostrar o proxecto e convidarvos a todas/os a visitar a exposición  que se levará a cabo a partir de Maio do próximo ano en Jinzhou, ó nordeste de Pekín.

 2013 world art landscape exposition Jinzhou
O Xardín Celta xurdiu con motivo dun concurso internacional de arquitectura paisaxista organizado pola cidade de Jinzhou para a“ 2013 World Landscape Art Exposition Jinzhou”.
O concurso buscaba unir as diferentes culturas do mundo a través da arte da paisaxe. Cada concursante elixido, debía propor un xardín inspirado en elementos característicos da paisaxe da súa rexión. Neste contexto, o Xardín Celta resultou seleccionado e será realizado xunto con outros 19 xardíns de arquitectos paisaxistas de todo o mundo, formando parte dun gran parque de 176 ha.

                                                                                              vista xeral xardín celta
O xardín, que está inspirado nas formas dos castros, parte da superposición de diferentes elementos circulares de distintos tamaños e funcións. No centro da parcela proponse unha lámina de auga circular na que aparece un pavillón cilíndrico de vidro para albergar un centro de interpretación da cultura celta. En torno ao lago, créanse distintas situacións mediante actuacións topográficas. Por un lado, volumes de pradería que estruturan o espazo e crean distintos puntos de visión. Mentres, superficies circulares esculpidas no chan, serven para ir descubrindo zonas de estar mais íntimas ou secretas.
planta xardín celta
Con outra lóxica tamén de círculos aínda de menor tamaño, son introducidas no xardín distintas variedades de plantas rastreiras que aportan cores e texturas. Pequenas superficies de pradería para o desfrute dos visitantes e símbolos da cultura celta impresos en pezas circulares de formigón.
Todas as plantacións tanto herbáceas como arbóreas, son dispostas por todo o xardín sobre unha matriz de círculos de distintas dimensións que funcionan como pequenas gabias. A disposición das plantacións conforma os camiños creando os sentidos de circulación e favorecendo percorrer  todo o espazo.
distintas vistas xardín celta
O xardín está pensado fundamentalmente en dúas lóxicas. Por un lado, a grande riqueza de situacións espaciais xunto co efecto de espello do ceo da lámina de auga e as masas de plantacións ricas en cores e texturas. Por outro lado, a simboloxía celta disposta por todo o xardín, tanto no chan como na fachada do pavillón, que pretende espertar o interese dos visitantes e facer que estes descubran no centro de interpretación, a cultura celta, a súa relación coa natureza e a súa incidencia na nosa paisaxe.
Durante o proceso creativo deste xardín, investigando a cultura celta, quedei fascinado coa relación que os celtas tiñan coa natureza.  Dalgunha forma, como cando coñecín As Salgueiras e a súa defensa da Biofilia.

Martín Toimil


21 de mayo de 2012

Niños de Cáritas perciben el sentido de la biofilia

El pasado sábado día 19 de mayo, veintisiete niños de Cáritas, acompañados por diez monitores, fueron recibidos por el personal y animales de As Salgueiras.

Todas las semanas en la Fundación AsSalgueiras realizamos actividades  con animales que demuestran que los "terapeutas de cuatro patas" son tan eficientes o más que una pastilla. Este tipo de terapias con animales, que tienen una contrastada validez científica y  gran prestigio en países avanzados, se basan en las cualidades naturales de los animales para obtener beneficios clínicos en los pacientes aquejados tanto de dolencias psíquicas como físicas
Además de nuestro trabajo habitual durante toda la semana, este pasado sábado los niños de Cáritas han tenido ocasión de conocer e interactuar con las manadas de vacas cachenas, con los caballos y con los perros que conviven en libertad en la finca. Dentro del programa de actividades, los niños han recogido a los ponis en el campo y se encargaron de acicalarlos bajo la dirección de la experta en psicología Iris Ramos y  de la veterinaria Begoña Sendón,  beneficiándose así de los efectos positivos que emergen de la relación humano-animal en un entorno natural.

Juan Ventura Lado y Ana garcía, periodista y redactora gráfica de La Voz de Galicia, lo han contado muy bien en su artículo “As Salgueiras permite que niños de Cáritas perciban el sentido de la biofilia”  que podéis leer en el periódico del pasado 20 de Mayo o en edición web de La voz siguiendo este enlace:
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/carballo/2012/05/20/as-salgueiras-permite-ninos-caritas-perciban-sentido-biofilia/0003_201205C20C10991.htm

Esperamos que todos lo hayan disfrutado.
Fundación As Salgueiras

16 de mayo de 2012

LA AMISTAD


Tojo en Flor
Hace ya algunos años de esto… era yo muy chiquitín. En esa época todavía iba mi abuelo a “rozar”  el “toxo” al monte con la hoz, más por entretenimiento  que por obligación. Para quién no sepa en qué consiste esta actividad, “rozar” es segar el tojo con el que después se esparcían las cuadras de los animales para de ahí sacar el estiércol. 
Yo, siempre que podía, me encantaba acompañarle. Era siempre el mismo ritual: lo primero afilar la hoz en la “moa” con su sonido característico que  ya me alegraba cuando lo escuchaba a medida que me iba aproximando a su casa. Por supuesto, tenía otra pequeña hoz para mi, a mi medida; quien me iba a decir a mí que cuando, al igual que la suya, afilaba en esa moa, lo que hacía en realidad era “desafilarla” para que no me pudiese hacer daño… 
Camino del monte...
Y ahí nos íbamos los dos, camino del monte. El primer montón que segaba, pues así se iba dejando, en montones o “gabelas”, era siempre el más mullidito, hecho de helechos y otros arbustos sin espinas. Esto era así porque, como cada día, un poco más tarde llegaría Ramón, compañero y amigo del alma de mi abuelo, se sentaba en su “gabela” y empezaban las eternas discusiones que, quien no les conociese,  diría que eran de todo menos amigos… 

Ramón, durante un tiempo estuvo afectado de una enfermedad que, bien por la enfermedad o  por la medicación, se quedaba dormido con mucha  facilidad, dejando la discusión a medio terminar. Mi abuelo, sacaba su chaqueta para taparle al tiempo que me advertía  – “neno, non fagas ruido eh, deixao durmir…” Siempre diré que pocas personas hacían tanta justicia a su nombre como mi abuelo, Benigno. Cuando Ramón se despertaba, mi abuelo continuaba la discusión en el punto que la había dejado como si nada hubiese pasado. 
                                                           
Pasaron los años, yo me fui a hacer mi vida y mis estudios y mi abuelo decidió partir de entre nosotros, a buscar otros montes. Para mí fue un duro golpe, ya sé que, como se dice en mi tierra “iba na súa hora”, pero era mi abuelo y le quería con toda mi alma. Estando en el velatorio, una figura familiar asomó por la puerta, muy encorvada  a duras penas conseguía caminar apoyado en su bastón, allí estaba Ramón. Nos abrazamos y dejamos que fuesen nuestras lágrimas las que sustituyeran a las palabras.
No sé si en ese lugar a donde dicen que vamos habrá monte, desde luego si lo hay estoy seguro que Ramón encontraría su “gabela” esperándole, igual que sé que una hoz, (espero que más grande y más afilada), allí estará preparada…

 *A esa personita, que tanto me quiso y que tanto me enseñó en esa asignatura, la más difícil y complicada que es ser Persona.